sábado, 30 de abril de 2011

   Ojos fríos como el hielo que al mirar clavan cuchillos punzantes,
mirada desgarradora y llena de odio que produce miedo al pasar,
corazón duro como la roca imposible de penetrar.
   Mente calculadora pensando que paso dar,
boca sangrienta que sólo se abre para lanzar la red,
oídos como antenas dispuestas a percibir el más mínimo detalle.
   Todo tiene que estar en guardia, alerta de la más mínima señal de pensamiento sincero,
los demás se preguntan ¿Qué oculta? pero nadie se atreve a descubrirlo,
no hay alguien que se de cuenta de esa soledad oculta en lo más hondo de su corazón.
   Tiene miedo a sentir, amar, a querer o reír, piensa que si lo hace el tiempo le dañara,
en un pasado fue feliz, quiso, amo, incluso deseo, pero aquello se convirtió en llanto y pena.
   ¡Oh, gran Netjer, ayúdale! Pon en su camino a esa persona que apague su soledad,
y le de la alegría de este pobre mundo.